CONCURSANTE. CRITICA

diciembre 14th, 2010 by Javi Pérez
Share |

Concursante

La autocomplacencia con que sobrevive el cine español se ve con creces superada en este caso, con una cinta transgresora, inédita y renovadora dentro del panorama de la industria nacional.  Rodrigo Cortés, deudor de las últimas tendencias del cine norteamericano y de grandes como Welles o Scorsese, confecciona una primorosa fábula surrealista con abundantes dosis de genialidad, que cabalgan entre la sátira mordaz y el drama psicológico. Martín Circo Martín, encarnado en la piel de un soberbio Leonardo Sbaraglia, es un joven profesor de historia económica que gana en un concurso de televisión más de tres millones de euros en premios. La onerosa carga impositiva y su torpeza para poder afrontar el mantenimiento de los premios conducirán al protagonista a una espiral destructiva. Martín se convierte así en un antihéroe que será capaz de llegar hasta las últimas consecuencias con tal de recuperar su fortuna.  En su camino, destacan personajes insólitos que harán las delicias del espectador ávido de extravagancia. Pizarro, un descarado abogado interpretado brillantemente por Luis Zahera, otorga delirantes momentos de humor a la cinta. Figueroa (Chete Lera) es un viejo y disidente economista que asesora a Martín en su cruzada dentro de un universo onírico en el que todo vale. Lástima es que en este rebosante crisol también hay personajes que se quedan en vacíos estereotipos. Ejemplo de ello es Laura (Miryan Gallego), en el papel de la novia de Martín, que se presenta como una felina antagonista y que tras algunas manidas intervenciones desaparece sin apenas desarrollo. Se intuye que era necesario rellenar los huecos de una historia más preocupada por la fachada que por cimientos más importantes. El guión, cuya estructura no lineal expone el relato con la implacable precisión del mecanismo de un reloj, acoge un derroche de recursos formales y estilísticos. La utilización de múltiples formatos (35mm, Súper 8, video digital, instantáneas) y recurrentes piruetas en la realización y el montaje revelan a Cortés como uno de los directores más experimentales, en la línea de los americanos Spike Jonze o Paul Thomas-Anderson. Tamaña obsesión técnica tiene inconvenientes, y es que el film es costoso de asimilar y comprender en determinados pasajes, en los que la trepidante voz en off acompañada de música e historietas ajenas a la trama principal puede conducir al hartazgo. De esta guisa, Rodrigo Cortés aprovecha los tiempos del fast food, la banda ancha y la alta velocidad para invitar a la reflexión acerca de la fragilidad del sistema financiero sobre el que se sustenta la actual sociedad capitalista, donde el dinero, en ocasiones, es un arma de doble filo.  Y es que mucho antes que Cortés lo dijo Séneca: “Grandes riquezas, gran esclavitud”, y eso que por entonces no existían los concursos de televisión.

Clasificado en CRÍTICAS tiene: Sin Comentarios »

Deja un comentario

Nota: La moderación de comentarios está habilitada y puede retrasar su comentario. No hay necesidad de volver a enviar su comentario.

"En esta industria, todos sabemos que detrás de un buen guionista hay siempre una gran mujer, y que detrás de ésta está su esposa.".
Groucho Marx (1890-1977) Actor estadounidense